A la mañana siguiente tenía unas agujetas... madre mía. Robocop estaba mejor articulado que yo. Llegué con dificultad a la universidad y me quedé estudiando en la biblioteca.
Uno de los días que me quedé por casa me animé a preparar una lasagna casera. Era la primera vez que me enfrentaba al puzzle de pisos de carne cara a cara, para fabricarlo y no para comerlo. Bueno, lo segundo vino después.
Esta semana se celebró una manifestación de la igualdad de derechos de la mujer, quedé con una compañera de la universidad y nos fuimos a investigar que se cocía por allí. Esperábamos a más mujeres ya que París se presta a ello, pero no fue el caso. No había mucha gente. Cuando digo que no había mucha gente me refiero a que no habría más de 300 personas. Si que encontramos a varios grupos reivindicativos con sus pancartas y sus megáfonos, pero teníamos la impresión de que más personas acudirían a la cita. La manifestación partió desde Nación y llegó hasta Bastilla. Durante el recorrido se iba añadiendo más gente.
Más tarde coincidimos con uno de sus compañeros de piso y nos tomamos un trozo de pizza y unas cervezas en un pub, el MizMiz en rue Oberkampf porque había un concierto en directo de música reagge. La nota curiosa de la noche es que encontramos un McDonald's y justo en la planta superior un gimnasio. Bueno, si te da remordimiento de conciencia comerte la hamburguesa, por lo menos te pilla cerca.
Uno de los días que me quedé por casa me animé a preparar una lasagna casera. Era la primera vez que me enfrentaba al puzzle de pisos de carne cara a cara, para fabricarlo y no para comerlo. Bueno, lo segundo vino después.
Esta semana se celebró una manifestación de la igualdad de derechos de la mujer, quedé con una compañera de la universidad y nos fuimos a investigar que se cocía por allí. Esperábamos a más mujeres ya que París se presta a ello, pero no fue el caso. No había mucha gente. Cuando digo que no había mucha gente me refiero a que no habría más de 300 personas. Si que encontramos a varios grupos reivindicativos con sus pancartas y sus megáfonos, pero teníamos la impresión de que más personas acudirían a la cita. La manifestación partió desde Nación y llegó hasta Bastilla. Durante el recorrido se iba añadiendo más gente.
Más tarde coincidimos con uno de sus compañeros de piso y nos tomamos un trozo de pizza y unas cervezas en un pub, el MizMiz en rue Oberkampf porque había un concierto en directo de música reagge. La nota curiosa de la noche es que encontramos un McDonald's y justo en la planta superior un gimnasio. Bueno, si te da remordimiento de conciencia comerte la hamburguesa, por lo menos te pilla cerca.