20 sept 2011

SOBRE SUELO FRANCES

...y después de 2 horas de vuelo aterricé en el aeropuerto Charles de Gaulle de París. Casualidades de la vida que se sentó justo al lado mía un chaval que estudia odontología en Granada que luego cogería un tren para la Bretagna, me dijo que no había metro en este aeropuerto, autobús (que tardaba como una hora y media en llegar porque iba parando en muchos sitios), tren (tres cuartos de lo mismo pero un poco más rápido) y taxi (un dineral).

Como ya la gente sobre las 19-20 se va a cenar y comienza a anochecer, pues le propongo compartir taxi y acepta, entre los dos sale rentable, 25 el tren, 17 el autobus, 50 el taxi pero entre los dos y 40 minutos hasta el centro ahorras tiempo por el mismo precio del tren.

Total, llegamos a la estación de Montparnasse donde él cogía el tren y yo el metro, au revoir amigo, ya nos veremos. Pillo el ticket del metro con el maletón cuando de repente al pasarlo por la máquina noto como alguien pasa justo detrás mía medio empujando, me vuelvo y me dicen, merci!, me paro unos segundos a mirar las ticadoras por donde pasa la gente y llegué a mi primera conclusión (la de que se habían colao con el dinero de mi billete no, esa era evidente), del 100% de la gente que toma el metro en París, un 30% no paga el billete. Increible! La pechá de gente que se cuela, jajajaja.

Bueno, esto si que es un metro, la línea 1 en hora punta que era la única que podía coger para llegar al hotel... te cagas, ¿cómo coño meto mi maleta en un sitio donde ni la gente cabe de pie?, pues en el segundo metro que pasó me tuve que abrir paso a empujones junto a una puerta que casi te pilla y donde molestas al paso de decenas de personas y tu parada es la octava, pardon, pardon, pardon. Cuando consigo irme al fondo vete hacia adelante porque te toca bajar a ti, jajajaj con el maletaco.

Consigo bajar, el hotel justo a la salida del metro, mientras voy por la acera cruzo un locutorio y un supermercado día, ya iba pensando, cena y teléfono. Llego al hotel, todo bien, suelto las cosas y bajo antes de que me cierre el supermercado, primero comer, antes de llamar por si me cerraba después.

Holaaaa, estoy vivo, no me ha pasado nada, ¿veis?
(esto va para la familia, jajjja). En fin, los precios bien, por lo menos en el día. Una pepsi de lata de medio litro (boicot a cocacola), un paquete de pan de molde, un plástico de queso en lochas y un paquete de papas fritas grande, 4 euros, tampoco es carísimo. Ea, pues mi primera noche me comí unos sandwichs con jamón que traía, queso, pepsi y patatas, nada mal. Troya en la tele para hacerme al idioma y al día siguiente a ver la facultad.

À demain!